«Nunca tuve la fuerza de voluntad por dejar de comer»
Podría escribir el libro de las mil dietas intentadas y fracasadas, siempre diciendo «El lunes comienzo»… «ahora sí que sí». Pero nunca superaba más de 3 días a dieta o me comía algo escondidas. O me decía que lo que comiera no iba a alterar en nada la dieta y al final llegaban los fines de semana y hasta ahí no más llegaba.
Nunca tuve la fuerza de voluntad por dejar de comer, pensaba todo el día en comida, mi mundo giraba en torno a ella, yo vivía para comer y no comía para vivir .
Recuerdo que desde los 12 años tenía obesidad, aunque no me daba cuenta de mi cuerpo a esa edad. Pero cuando llegué a la adolescencia lo empecé a notar.. mis amigas delgadas estaban pololeando y yo ahí como el patito feo del grupo.
Así seguí en el colegio, universidad y matrimonio. Llegué a pesar 120 kilos aprox. cuando vi la opción de hacer una cirugía bariátrica. Mi maravilloso esposo me dijo si con eso me iba a sentir más segura que lo hiciera. Él me ayudó en todo el proceso el cual es muy largo, que a veces es un poco tedioso pero el final es maravilloso.