La importancia de mantener los huevos a la temperatura ideal

La clave para consumir alimentos y no enfermar es que estén frescos.

Esa, es una regla de oro que todos sabemos. Y cuando llega el verano, muchas veces esa frescura se ve interrumpida por las altas temperaturas, que este año se pronostican más altas y secas de lo normal.

Y el caso de los huevos es especial. Este superalimento es consumido a diario por muchos de nosotros debido a su versatilidad y aporte nutricional y mantenerlos alejados de extremos golpes de calor es primordial.

Expertos, aconsejan que los huevos se deben mantener en un lugar fresco y seco que tengamos en nuestras casas, en donde, ojalá, la temperatura no varíe mucho y tengan sombra todo el día.

“Es una buena medida guardar los huevos en el refrigerador y así evitar problemas por calor, solo debemos tener en cuenta que, una vez que metemos los huevos al refrigerador, debemos mantener la cadena de frío hasta consumirlos”, aconseja José Luis Moure, gerente general de Huevos Santa Marta.

Detectar un huevo en mal estado es tarea sencilla; lo sabremos por su olor y su cambio de textura al interior, en la clara y en la yema. La temperatura ideal para mantener un huevo en buen estado, oscila entre 1° y 10° y la humedad no debe superar el 80%.

Y no solo los huevos deben recibir especial atención para no correr el riesgo de consumirlos en malas condiciones, lo que puede provocar malestar estomacal, náuseas, vómitos e incluso fiebre.

Las gallinas, también deben ser atendidas. “Nuestras gallinas son las que mejor están en el verano, ya que tienen ambiente controlado que varía entre los 24 y 26 grados. La tecnología de punta implementada en Huevos Santa Marta logra mitigar los efectos del clima y hace que el bienestar animal sea nuestro caballo de batalla en la producción de huevos”, cuenta José Luis.

Según el ejecutivo, hay dos deliciosas formas de disfrutar de los huevos este verano de altas temperaturas: 

Duros, meterlos en el refrigerador para que estén fríos a la hora de comerlos.

Pochados, sobre unas tostadas con palta.

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