Crean chips comestibles de tallos de brócoli y pepa de zapallo

• En marzo comenzará la venta del snack, que bordeará los $600.  

Por Francisca Orellana

Tres tipos de snack bastante atípico se va a comenzar a vender en marzo próximo. Se trata de rebanadas de hojas de apio y betarraga y hasta con pepas de zapallos. Ornella Tiboni y Francisca Silva están detrás de Rukai, emprendimiento apoyado por Corfo y por el cual buscan utilizar los remanentes que quedan de la venta de verduras en ferias como tallos, hojas o pepas, y evitar el desperdicio de alimentos.  

Tras casi un año de investigación, van a colocar su primer producto a la venta, que llegará en tres versiones: la opción light alto en antioxidante con apio y betarraga, el para deportistas, con zapallo, betarraga y el clásico, que será una mezcla de los dos con tallo de brócoli.

En una primera instancia, llegará a tiendas saludables especializadas en Santiago, como Green Is Better, y quinta región (Tienda Bodhidharma), a un precio de entre $600 y $700 la bolsa de 40 gramos. La meta es poder llegar a vender unas 50 mil unidades mensuales.

“Los vegetales pasan por un proceso de deshidratado que no destruye las vitaminas ni nutrientes. La idea de este snack era que fuera lo mismo que comerlo como su estuviera en una ensalada, lo que implica que sigue siendo saludable, no es fritura como los snack tradicionales, lo pueden comer los celiacos, hipertensos y hasta diabéticos porque sigue siendo verdura”, comenta Ornella Tiboni, de Rukai (https://www.facebook.com/RukaiAlimentos)  

Sacar adelante el proyecto no ha sido fácil, dice, porque están trabajando un campo poco estudiado en Chile. “Estamos usando productos no comestibles donde no existe información, entonces hay un castigo en el mercado por hacer innovación y nos ha costado avanzar y levantar recursos para poder tener, por ejemplo, nuestra propia planta de producción”, detalla.  

Dentro de los próximos pasos, la meta es crear una papilla sin preservantes y nutraceuticas para niños. “Esperamos en agosto tener algo concreto, pero queremos algo saludable y de bajo costo para que pueda llegar a niños vulnerables. Hay productos en el mercado pero son de alto precio, queremos buscar algo más económico”, comenta.